Nuestro jabón de Aleppo además tiene tres características importantes que mejoran la experiencia en su uso:
- Su tamaño es de 110 g y tiene forma de barra, a diferencia de la habitual forma de cubo que se mantiene así por motivos de ahorro en logística.
- El proceso de saponificación se realiza en un ambiente controlado tanto a temperatura como a humedad, lo que hace que el jabón se saponifique de manera uniforme, teniendo un color y textura homogéneos y conservando el delicioso aroma a frutos del laurel.
- Lo elaboramos con el aceite de la pulpa de las bayas de laurel, lo que potencia sus beneficios. Este era el método tradicional, que ha sido modificado debido a la dificultad de manipular el aceite en este formato.
Contiene sales naturales que permitirán su uso incluso con aguas duras (con cal y otros metales), generando aún la espuma cremosa tan característica del Jabón de Aleppo.
Ingredientes estrella:
- Aceite de oliva virgen extra de producción ecológica, que aporta protección frente a los factores ambientales más nocivos con los que convivimos hoy en día. Tiene propiedades emolientes perfectas para pieles secas y ásperas, además de aportar una hidratación profunda, contiene numerosas vitaminas con efectos antioxidantes.
- Aceite de laurel de producción ecológica, que tiene propiedades antibióticas, antisépticas y antifúngicas. Además, es muy nutritivo y aporta suavidad y elasticidad a la piel. Está especialmente recomendado para pieles sensibles y dañadas. El jabón elaborado con este aceite es el que se utilizaba tradicionalmente para curar heridas, tratar picaduras de insectos y limpiar la piel afectada por alergias, irritaciones, dermatitis, eccemas, psoriasis, acné, herpes, etc.
Es un jabón sin perfume, por lo que es apto para todo tipo de pieles, incluso las sensibles. Sin embargo, podrás disfrutar del característico aroma del laurel. ¡Una sensación que te cautivará en la ducha!
Sin perfumes, apto para uso frecuente y apto para veganos.